La casa está situada en el Monte Abantos, en un pinar orientado a sur y con inmejorables vistas sobre el Monasterio de El Escorial.
El proyecto —la casa radiante— arrancó diseñando una habitación tipo que, con independencia de su tamaño, tuviera una buena adaptación climática —tanto soleamiento en invierno como enfriamiento nocturno en verano— y disfrutara de las vistas del monasterio. Parecía importante que cualquiera de las estancias se pudiera abrir durante los meses de verano para poder disfrutar de la refrescante brisa nocturna.
Cada estancia necesita dos ventanas. Una ventana panorámica para disfrutar de las vistas y otra ventana que posibilite la ventilación cruzada. Las necesidades climáticas llevaron a una materialidad que combinara la masividad con la madera, cuestión que está conectada a la cultura material de la Sierra de Guadarrama. La necesidad tanto de inercia como de aislamiento térmico llevó a combinar hormigón expuesto al interior, aislamiento térmico con corcho proyectado, y revestimiento de madera al exterior. El comportamiento termodinámico fue mejorado con un sistema de radiación embebido en las paredes.
El proceso de proyecto trabajó con siete estancias —estar, comedor, cocina y cuatro dormitorios— probando distintas configuraciones espaciales sobre la parcela. Estas organizaciones negociaban entre estas tres variables —sol, ventilación y vistas—testándose paramétricamente la solución que las equilibrara. La configuración escogida organiza las estancias en dos niveles. Los dormitorios se localizan en el nivel superior, generando un porche cubierto que en combinación con la sombra de los pinos, ofrece una atmósfera confortable en los días de verano.
Estancias radiantes. La radiación solar penetra la estancia a través de la ventana de modo que, a través de radiación directa y efecto invernadero, calienta la masa de hormigón interior, almacenando el calor. El aislamiento con el corcho proyectado y el revestimiento de madera evita que el calor almacenado se disipe al exterior.
El hormigón tiene una alta efusividad térmica (2036 s1/2 W/m2 C) y por tanto tiene una buena capacidad de almacenar el calor. Por otra parte la madera y el corcho proyectado tienen una baja efusividad térmica (cerca de 500 s1/2 W/m2 C) y por lo tanto son buenos aislantes. La combinación de los dos maximiza el almacenamiento de calor en invierno y de fresco en verano, minimizando las pérdidas de energía
PLANOS Y TERMODINÁMICA
CRÉDITOS
Location: San Lorenzo de El Escorial, Madrid
Premios: Shortlisted Premios COAM 2014
Fecha: 2012-2014
Cliente: Privado
Superficie construida: 410 m²
Arquitectos: TAAs (Javier García-Germán + Alia García-Germán)
Equipo de Proyecto: Alia García-Germán, Elena Fuertes, Begoña Leal, Jesús Sanabria, Jaime Yndurain
Dirección de Obra: Javier García-Germán
Consultores: GARVAL ingenieros, ADVENTIA ingenieros
Aparejadores: Lucía Gigante
Contratista: FMS construcciones
Presupuesto: 1.600.000 €
Fotografía: Miguel de Guzmán